Si tu suelo ha sufrido manchas de agua o líquidos, hoy te damos algunos consejos sobre cómo reparar la tarima flotante mojada.
Aunque la tarima flotante es uno de los materiales más resistentes que podemos usar, es probable que por culpa de un despiste, un accidente o simplemente por el paso del tiempo, acabe dañándose.
La humedad y el agua son dos de sus grandes enemigos, sobre todo si no contamos con tarimas flotantes de calidad y con una alta resistencia, como las que trabajamos en Payresa para ofrecer una mayor garantía y tranquilidad a nuestros clientes.
Si tu suelo ha sufrido algún daño por culpa de líquidos, en el artículo de hoy te explicamos cómo reparar tarima flotante mojada. ¡Sigue leyendo!
Cómo reparar tarima flotante mojada por líquidos
No es extraño que en una casa, así como en oficinas o locales comerciales con suelos de tarima, pueda ocurrir un descuido y acabe precipitándose sobre el suelo agua u otro tipo de líquido.
No te preocupes, no tiene por qué ser nada grave. Tiene solución, aunque debemos actuar con rapidez para que no acabe convirtiéndose en un problema mayor.
Lo primero será secar toda la zona ayudándonos de papel de cocina. Si hemos llegado tarde y el agua ha llegado a calar entre las juntas, la mejor opción es usar un secador de pelo. El secador nos ayudará a secarlo, pero su temperatura no dañará ni quemará la tarima.
Si no nos hemos dado cuenta y el líquido ha permanecido bastante tiempo durante la superficie, puede ser conveniente acercar una estufa o radiador a la zona para eliminar los restos de humedad que hayan podido calar en las láminas.
Este truco sobre cómo reparar tarima flotante mojada lo podemos aplicar para el agua, pero también a todo tipo de líquidos. Eso sí, si se nos derrama zumo, leche o refresco, es recomendable frotar la zona con detergente suave. Si la mancha es de orina de mascotas, es conveniente usar un desinfectante sin lejía.
Cómo reparar tarima flotante mojada que ha acabado abombada
Si el líquido ha estado demasiado tiempo sobre la superficie hasta que nosotros lo hemos secado, es probable que el daño sea mayor y que puedas encontrar la lámina abombada y deteriorada.
¿Esto por qué ocurre? Con la humedad y los cambios de temperatura, las láminas de madera tienden a expandirse. Esta es una de las razones por las que, a la hora de instalar el suelo, siempre debemos dejar una junta de dilatación entre la tarima y la pared.
En el caso de absorber mucha humedad, o porque la tarima sea de mala calidad, puede acabar deformándose y, como comentábamos, abombada. En este caso, ¿Cómo podemos reparar la tarima flotante mojada?
La primera opción será intentar eliminar la excesiva humedad con un secador de pelo o una estufa, como hemos explicado anteriormente. En caso de que el suelo no vuelva a su estado original, tendremos que sustituir las láminas dañadas. Aunque pueda resultar muy laborioso, es más sencillo de lo que parece. Únicamente nos bastará con extraer la lámina o láminas dañadas. Debemos secar su hueco hasta asegurarnos que no quede húmedo.
Ahora es el momento de sustituir la lámina deteriorada por una nueva. Es recomendable, a la hora de instalar un suelo de tarima flotante, reservarnos un excedente de material y guardarlo para emergencias como esta. En caso de que no sea así, compraremos una nueva lámina del mismo modelo. Si ya no se fabrica, podemos elegir un modelo parecido o extraer una lámina de alguno de los lugares donde no sea visible, como puede ser debajo del sofá o la cama.
Ya sabes cómo reparar tarima flotante mojada… ¡Y es hora de ponerse manos a la obra! Aunque recuerda que la mejor opción para evitar complicaciones es optar por tarimas de calidad, de alta resistencia y duración. ¿Tienes alguna duda? En Payresa estaremos encantados de atenderte.